Este es un pequeño escondite lleno de recuerdos del año que perdí el tiempo, del año que viví como me dio la gana.
Esto es un esbozo de felicidad, un juego sencillo. Es pintar lo que ves, sin más, con el lápiz o lo que lleves encima. A veces de pie, otras sentado, algunas veces solo, otras veces, acompañado. Unas bebiendo mezcal, otras comiendo aceitunas, la mayoría de día, algunas de noche.
Y así, sobre la marcha, fueron, nacieron todos ellos. Cada uno tiene un olor, un sabor y hasta un sonido de fondo.
Espero que sean una buena compañía de esta noche de copas.

Madrid, Mayo de 2023